Quiero BOLOmitar.

Después de que la creatividad ha muerto, no nos queda más que recurrir al pasado y tomar las formulas que en algún tiempo sirvieron, disque refrescandolas y dándoles un nuevo giro, o como los creadivos llaman: "La Girivilla", y Olé, ¡como en Madrid!

Al parecer este es el caso de Liverpool, ya que en su desesperada búsqueda por tener un link navideño con todo el pueblo, en lugar de innovar y crear nuevas estrategias mercadológicas, decide traer de la tumba; no a María Félix, no a mariana Levi, ya ni siquiera al dios Eolo, del que todo mundo habla, más bien decidieron traerse a BOLO, un muy lindo osito, cuya animación es buena, pero no se quien escribió el guión de esta modernizada historia, porque como muchos de ustedes ya saben: ES UN ASCOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO.

Si, muchos ya conocían a tan inocente osito, ya que hace mucho tiempo fue mascota oficial de Liverpool, y ahora regresa con una historia, que en lo personal es pésima o beyond pésima, super pelusita, que además tiene temas muy bien manejados por debajo de la mesa, de adopción, un muy buen pasón de drogas, un poco de exclavitud, falta de respeto al núcleo familiar y desorden mental de la mamá de dicho osito.

Lo que si debo reconocer y aplaudir, es que en los aparadores de Liverpool, recrearon muy bien la historia y la cuentan de principio a fin, por medio de apretar los interruptores que están fuera de cada aparador, logrando una interacción increíble con el público y principalmente los niños, que darían lo que fuera por meterse a uno de tantos aparadores, además no sólo eso, te llevan a tal extremo que te hacen vivir la experiencia, ya que por ejemplo en uno de ellos, dónde el oso polar no soporta la nieve de polo (que pendejada, ¿no que los osos polares no viven en la nieve?)pusieron unos ventiladores que te hacen sentir el frío que el osito tristemente pasa. Se ve que le inviertieron bastante bien al show, lo cual lo aplaudo porque se me hizo muy bueno, y a pesar que la gente no analiza el contenido de estos anuncios, se va a sentir atraída por él, para lo cual no faltaran los cometarios de niñas, niños, y por supuesto adultos de: ¿¡ay, ya viste a bolo!?

No creo que les vaya tan mal, pero al menos deje lo que pienso en estos lienzos que día a día dejan historia en nuestros pensamientos, y al toparnos inesperadamente compartimos estas coincidencias. Espero alguno quiera opinar al respecto, ya que seguro hau más de uno que defenderá al oso negreado de Bolo. Enjoy. xox.