Después de años de anhelarlo, al fin el camino me trae de regreso a la actividad que me ha llenado de la más grande satisfacción que he tenido en mi vida: el teatro. Tras alejarme del escenario hace ya varios años, pensé que sería imposible regresar y más cuando mis actividades personales, la carrera y el trabajo me han alejado a pasos enormes.
Pero gracias a Germán Robles puedo ver esta luz brillar de nuevo y comienzo con una muy divertida lectura dramatizada de Shakespeare con su obra "Sueño de una noche de verano" y una pequeña presentación musical de las canciones de "Moulin Rouge", una noche mágica que me da la bienvenida de regreso al escenario y que me emociona de manera impresionante; los dejo con algunas imagenes de dicha noche. Espero verlos en la que sigue.
P.D. Perdón por el enfoque, pero la cámara ya andaba chafeando:(.
El Abuelo.
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