Las nubes en el cielo se juntan
les gusta chocar, unirse, volverse una;
y de esa unión caen entre nosotros
esas gotas que nos mojan o vemos escurrirse en un cristal.
Son esas señales que nos hacen ver que nos ven
que refrescan nuestra cotidianeidad
que escurren nuestras preocupaciones y pensamientos.
Ecos y olor a tierra se levantan del piso
y nos hace entrar en un estado de coma
interiorizar momentos y situaciones
que nos llevan a un lugar incierto
y son esas mismas las que nos trajeron hasta aquí.
Es cuando ese momento se convierte en tiempo especial
ese tiempo cuando los deseos, los sueños y los siguientes pasos se unen;
al igual que las nubes y sus colores apagados que dan como consecuencia el agua;
sólo que hay situaciones que no sabemos qué den como fruto,
es sólo cuestión de tiempo para saberlo.
El tiempo lo doy, y espero con ansia saber el resultado,
y más cuando estoy parado frente a la esquina
de lo que más he deseado por mucho tiempo...
Tal vez sea que como me dijeron...
por fin me toca.
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