El peso en los hombros
y el ardor de los ojos
ciegan mi panorama.
La cabeza parece explotar
y el cuerpo duele en cada espacio
se siente pesado y encerrado.
Cosquillas en los pies,
dolor en la espalda
y ardor en los labios.
Un ligero zumbido
no me deja oir ni lo que pienso
agotamiento extremo y falta de fe.
Dolor es la única palabra
que a veces deseo tanto
que saliera de la piel,
por cada poro, y simplemente...
que todo cambiara.
Encerrado en mi mente
encarcelado en mis ideales
atado a mis sentimientos
y las eternas ganas del cambio
me llevan a mirarme a un espejo
y sólo notar que...
MUERO DE CANSANCIO.
El Abuelo.
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