sábado, enero 17, 2009

Ensalibados

Mis ojos ven tu reflejo, te estás acercando poco a poco, mis pies sienten el desnivel del piso y saben lo famoso del lugar, pero se estabilizan fuerte no quieren dejarlo; pero el suspiro me eleva, tus caricias me impulsan a volar, a sentir la libertad del vuelo y ver a la ciudad y a todos los que en ella habitan hacia abajo. Poco a poco te siento en mis labios y cierro los ojos, es un pequeño roce de inicio, un roce jugoso que me eriza la piel y aviva mis poros. Siento tus manos sujetadas a mi cuerpo, me tocan, me estremecen, me llenan de calor. ¿Será que esta vez si siento amor? a pesar de los cercanos y del ajitamiento, lo que siento va más allá que el deseo carnal, es una leyenda, una historia que se escribe en páginas blancas y cuta tipografía se comienza a plasmar con deseos de dejar huella. Tus labios comienzan a juguetear con los míos, siento un ligero roce de tu lengua, es pefecta y soñada, cálida y se conecta a la perfección conmigo; la sola sensación hierve.

Nunca había estado en un momento tan mágico, nada lo podía arruinar, el lugar y el tiempo eran perfectos; pero como describo... "Era" porque en pleno sentimiento a flor de piel, esa flor fue de sólo ese día, ya que de repente fuimos interrumpidos por una luz y gritos, al momento sólo pude abrir los ojos y ver como las luces rojas y azules jugueteaban entre nosotros, un coche estacionado y dentro de él salían con rapidez un par de botas negras y pantalones azules. Se apresuraron a separarnos y ponernos contra la pared; el tiempo era raro y en cámara lenta, sólo oía gritos de enojo y furia, me sentí que cometí el peor de los crimenes y nuca olvidaré tu cara de asombro mientras la envestida.


Después de ser esposados y llevados al coche sólo entendí la palabra multa,y así es como el universo nos interpuso un papel con números, mientras el momento mágico sucedía; el pecado: UN BESO; lo irónico, bajo el callejón del beso, sí en Guanajuato... ¿Será que las autoridades son frígidas y nos tienen envidia? no lo sé, pero el solo pensamiento me hizo reír mucho, por que al minuto de haber salido de pagar la multa, te tomé de la mano y te lleve a ese mismo callejón dónde repetimos nuestra unión bucal para quedar frente a ellos una vez más ensalibados.


(Osea, no hay más que decir, la inteligencia será una contsante, mientras la estupidez siga creciendo; una muestra más de las decisiones tan estúpidas de nuestros mandatarios, en lugar de ponerse a trabajar en lo que importa; aún así hagan sus acciones retrogradas seguiremos besandonos, ¡¡¡¡mua!!!!)

1 comentario:

Anónimo dijo...

FELICIDADES

MARAVILLOSA DESCRIPCION

ME HICISTE IMAGINAR LA ESCENA IMAGINARTE A TI O A QUIEN LO NARRA HASTA PUEDO DECIRTE QUE ME HICISTE SENTIR EL BESO

GRACIAS POR TU POST, ME HICISTE AÑORAR UN BESO ASI

DE VERDAD FELICIDADES