martes, abril 26, 2011

No dejo de soñar

Me gusta soñar, pase lo que pase intento no dejar hacerlo porque es un impulso que me permite seguir caminando, suspirando por la ilusión de ver tangible aquello que sueño.

Mucha gente se burla de la gente que sueña, pero se puede vivir con los pies en la tierra y soñar sin parar, soñar aún con los ojos abiertos, soñar con el tiempo y en cualquier lugar.

El punto es nunca dejar de hacerlo. Porque en el momento en el que el sueño muere, también lo hacemos nosotros.

Ayér soñé con Europa y Nueva York! Algún día se cumplirá!

El Abuelo.

domingo, abril 24, 2011

Un momento para celebrar

Hoy me puse a pensar en las veces que nos toca vivir sucesos importantes como juegos olímpicos, el nombramiento de un nuevo presidente, la boda entrante de Kate o la tragedia que sufre un país a causa de los desastres naturales. Son temas que nos incumben a todos y que son de interés general, pero cuando hablamos de un sector más individual ¿Qué probabilidad tenemos de celebrar nuestros propios sucesos importantes? Y con esto no me refiero a festejar cada año nuestro cumpleaños.

Llega un momento en nuestras vidas donde nos sentamos a ver al horizonte y entendemos que si nosotros no comenzamos a escribir en nuestro propio libro con páginas en blanco, nadie más vendrá a agarrar la pluma y escribirla por nosotros. Muchos logramos tomar la pluma a temprana edad, otros se dan cuenta muy tarde que las hojas y la pluma estuvieron siempre ahí y se arrepienten de no haberlo hecho antes.

La lista, en el caso que sea, está llena de sueños, objetivos y cosas por cumplir. Muchos dicen que de esto se trata la vida, de irse poniendo retos continuamente. De hecho siempre se habla de estos retos como una obligación moral que cada persona debe cumplir; pero porque nunca se habla de qué se debe hacer cuando la lista se vuelve interminable, o cómo ir celebrando nuestros retos o si existe alguien que haya partido al más allá sin ningún punto de su lista pendiente.

El punto es, que no importa el tiempo que pase antes de cumplir con nuestros propios retos, sino que cada vez que los cumplimos, se cierra un ciclo en nuestras vidas que no sólo nos permite avanzar, sino evolucionar y madurar, y esto señores es un gran motivo para celebrar.

Sí, hacer una gran fiesta de celebración por esos pequeños pasos que nos hacen sonreír y evolucionar y que no fueron nada sencillos de alcanzar. Así que con esta pequeña intervención les propongo que cada ocasión que logremos algo que nos costó mucho obtener, siempre lo celebremos desde nosotros mismos de alguna manera personal o con todo el mundo que es importante para nosotros, ya que si no comenzamos con este pequeño ritual ¿Cómo queremos que nuestro paso por este mundo no quede marcado para la historia? Una cosa lleva a la otra ¿no?

El Abuelo.

jueves, abril 21, 2011

Jueves

Qué bien se empiezan a sentir estos días de descanso. Es como esa brisa que poco a poco golpea tu rostro en días de calor, simplemente te hace cerrar los ojos y sentirla; inevitablemente te pinta una sonrisa y la imaginación cobra vida.

Ha sido un día de meditación, de relajación y de aprender a disfrutar de la brisa que nos golpea, misma que muchas veces no nos damos cuenta que está ahí, tratando de llamar nuestra atención, y a pesar de que en muchas veces no es vista, no se rinde, siempre sopla buscando alguien que permita a sus sentidos simplemente sentirla.

Hay muchas veces en las que me pregunté el por qué las cosas no me resultaban, miles de cuestionamientos acerca del porque los esfuerzos no funcionaban, y después de un tiempo intentando lo que no se daba, logro entender que las cosas suceden por algo, y simplemente ocurren en el momento que deben suceder. Esto no significa que sea fácil o que una vez que se dan las cosas simplemente ya no habrá más obstáculos, pero se siente bien el voltear a ver el camino recorrido y sentir que todo vale la pena.

Hoy puedo voltear atrás y sonreír y también ver hacia delante y aceptar la nueva cuesta arriba que ahora veo ante mí. Y esta alegría que hoy tengo en el pecho, la quiero compartir con ustedes en esta fresca tarde de relajación.

Suspiros y respiros… con el corazón.

El Abuelo.

miércoles, abril 13, 2011

Sonrisa

Los días se aceleran con el paso de las horas que a pesar de llevar un ritmo muy marcado y constante, mágicamente ya no se sienten. Los colores brillan a lo alto y el calor es fuerte, pero se disfruta más cuando hay factores que generan brisa que golpea mi rostro y me hacen sonreír.

El tiempo libre se ha acortado, pero las satisfacciones son enormes. Soy feliz, y conste que hace ya mucho tiempo no lo escribía.

Ahora sólo mi mente me lleva a soñar, a viajar por lugares lejanos y a no separarme de esto que se siente tan bien, sin remordimientos, sin miedos, sin fingir.

:)

El Abuelo.

miércoles, abril 06, 2011

¡Upsi!

Perdóoooooon, sé que han pasado muchos días y no he escrito nada, pero mi nuevo ritmo laboral me lo ha impedido, tantas cosas que contar y tan poco tiempo para expresarlo. De repente volteas y te das cuenta que en siempre hay una situación que es increíble que suceda y me hace preguntarme, ¿Por qué cuando uno busca paz, siempre se desata la guerra? jajajaja en fin. Pronto haré un espacio para ahondar más en algunas ondas que traigo, pero agradezco la espera de los que me siguen.

Pronto más noticias.

El Abuelo.