Pues sí, ayer tuve la segunda y grandiosa oportunidad de asisitir al concierto de mi banda favorita, me refiero obviamente a "Coldplay". Todo empezo con una tarde de películas y muuuuuuucha hueva en casa de mi mejor amigo Adrián, ya tarde decidimos salir a caminar por las calles aspiracionales de la famosa Condesa, acabamos saboreando una deliciosa nieve y leyendo libros en la mega biblioteca que sobresale en tan conocida colonia.
Salimos solo para dirigirnos hacia el Auditorio Nacional, donde después de cardiaca espera y de una muy desafortunada presentación del grupo Volovan, Chris Martin y sus compañeros salieron entre las luces blanxas que se movían en el escenario, para empezar su maravilloso concierto, donde viajaron a través de su discografía sin dediacrse más a tocar sólo de un solo albúm.
Esta maravillosa banda, que de sus sonidos rockeros, transforma el ambiente en una acústica y romantica velada, intercatuaron con nosotros, desde tomarnos fotos y aventar las camaras, hasta bajarse y convivir con la gente mientras cantaba el ahora esposo de la Paltrow.
Muye emotivo fue ver los globos de color amarillo y los enormes mientras entonabamos "Yellow" y la parte que más me emocionó fue cuando hincados le cantaron al pueblo mexicano "Till Kindom Come" una de mis rolas favoritas de la banda y que a mi manera de ver es la mejor que se le puede dedicar a alguien.
En fin, una noche de magia, sorpresas y emociones que de mi mente no se borraran jamas, y seguiré esperando que vuelvan a lo que ellos llaman, la tierra que tiene a sus fans favoritos, los mejores del mundo, jejeje osea México.
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